Aprovechando el día tan agradable que se presenta para la fiesta de los Santos y aprovechando el la
ruta que Calleja nos ha metido en la cabeza, no había duda de lo que nos esperaba ese día.
Madrugamos lo justo, montamos las bicicletas y a las 11.00h empezábamos a pedalear Lelu, Ines, Javi Vargas, Sete y yo (Chao) desde el monasterio de Santa María la Real en Aguilar. Además del coche de apoyo-almuerzo que conducía Raquel. La ruta consta de 57 Km con unos 1.000 m de desnivel positivo, donde se pueden apreciar las maravillas del románico palentino.
La ruta comienza fácil y nos vamos tomando nuestro tiempo para hacer fotos, ver capiteles, etc
En Cillamayor nos encontramos con nuestra amiga Marisol, que nos explicó todos los secretos del románico de allí, pero el tiempo se nos venía encima, así que decidimos apretar un poco más los pedales.
Hasta que llegamos a Villanueva de la Torre donde nos estaba esperando Carlina (la original, no la 2.0) con unos bombones por su cumpleaños, una señora encantadora y con un amor a su pueblo más que envidiable.
Así seguimos la ruta con la obligada parada de almuerzo en Salina de Pisuerga
Durante el camino fuimos encontrándonos a bastante gente que animadas por Calleja se dispuso a completar la ruta como nosotros y a disfrutar de sus maravillosas. Ya de los último pueblos tenemos a Valdespinoso de Aguilar con su iglesia subida en un pequeño alto.
El tiempo se nos echaba encima para llegar a comer, por lo que los último kilómetros fueron un tanto ligeros, pero aún así no llegamos a comer a la hora concertada, así que nos compramos unos bocatas y nos fuimos a ver la sequía que acecha la provincia y en concreto el puente gótico de Renedo de Zalima en el pantano de Aguilar. Todo un centro turístico de gente y coches contemplando las maravillas afloradas por la sequía
Nos vemos en la siguiente, que la nieve ya ha llegado!
Lelu, Inés, Javi Vargas, Sete, Raquel y Chao